“En un lugar de la Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme” … creo que voy mal, esto es otra película.
Qué sábado!, qué tiempo!, qué maravilla!. Salida recorriendo varios pueblos de la comarca, con un tiempo totalmente primaveral y temperaturas excelentes rozando allá por los veintitantos.
Allá van un montón de intrépidos una vez más en busca de aventura, ¿dónde vamos? ¿y si hacemos?, no por aquí no que pinchamos … ¡leches! que finos nos hemos vuelto; en fin comenzamos.
Subimos la primera magra en busca de Gamonal y cuando pasamos el puti resulta que viene la segunda, y como si una tiesta de cubatas lleváramos en el cuerpo vamos y echamos la pota … buen comienzo y qué bonita la Atalaya. Pasamos Mejorada y …
· oye cuando se para a comer
· ¡joder que acabamos de empezar!
Uno con hambre, otro sin agua, otro sin ganas, otro con gases, esto pinta bien; si por tener tenemos hasta mariquitas, que no puede tener uno el culo bonito que te le soban más que en chueca. Menos mal que el paisaje y el paisanaje que saluda sin parar a la comitiva que vende pimientos resultan de lo más.
Bonito camino el de Cervera, cojonuda la bajada y por fin el ansiado break en el que no falta el chocolate del lechuzo, que por fin nos hemos dado cuenta de porque se ha hecho tan largo (el tio solo come chocolate y dátiles, vaya estatura tiene el niño, y ¡qué pies!; aprovechamos la ocasión y aprendemos bailes de salón, total son 10 € al mes dos días a la semana, y ya sé hacer el cuadrado (tu haz lo que quieras que los 20 € del bolsillo te los vamos a cepillar).
Qué bajada la de Pepino, menos mal que las magras se han dado la vuelta, pero mira tú por dónde esta vez el presi va y jode la bici (con lo que me había costao la última reparación), nos os preocupéis que llamo a casa … si si, espera que esto tiene reparación que vas a seguir sufriendo con nosotros, espabilao.
Sigue y sigue la ruta, pasamos por el precioso paisaje de la Portiña, y se me olvida hacer mención especial una vez más al fotógrafo, que siempre nos acompaña y que sigue comprando carretes y fotografiando … ¿cigüeñas?, anda que ya le vale.
Entramos en Talavera y por el carril bici y algún que otro percance (¡quita coño que es un carril bici!, no stacioning, no pasee al perring, no sienting con la butaca, no porring <que peste> … mucho etc esta vez) va el potas y se tira al suelo; recuperamos aliento, y por el cordel regresamos en busca de nuestro merecido vino y a ver si destrozamos los 20 €.
Saludos a todos, no os ofendáis, que ahora me tocará recibir a mi.
Os espero en la próxima, aunque sea con las mismas ganas.
Aúpa la media!