Como siempre y de costumbre, en
el mismo sitio y a la misma hora. Amanecía nublado, fresquita la mañana, y
siguiendo la línea editorial de Checharito, pasamos lista: grandes son las
ausencias, Largo-te y Benito están de Chirriboda, Checharito con su quehaceres,
Fabio preparando la comunión del pequeño de sus retoños, Po-Cholo, que anunció
su reaparición, lo deja para otro día, er Viti con sus vacas, en fin, los
presentes … el Abuelo que no falla a pesar de tener padel, el Presi, Pakito,
Meji, Cuerpo que aparcó la caña para volver, Torres que vuelve ¡con fuerza! and
I.
Salimos con intención de subir al
cerro de La Estrella, y cogemos la temible culona, pero llegando al puente
Amador y debido al aire en contra, la Semana Santa comienza a pasar factura a
más de uno, que si las torrijas, que si comidas familiares, que si agua de
Valencia … “vosotros id dónde queráis que yo en Aldeanueva me doy la vuelta”,
dicho y hecho, primera paradita y el grupo se divide en dos. El Presi ha
cumplido, el Abuelo “yo tengo padel a la una y se nos va a hacer tarde” … etc.
Las fuerzas del resto no son las
optimas, decidimos coger el camino natural del Tajo e ir hasta Puente en vez de
subir al cerro de La Estrella.
El camino se vuelve más ameno y
entretenido, pero aparecen pequeños problemas, puertas cerradas que días antes
no lo estaban, y más problemas esta vez lo están con candado incluido; además y
debido a las intensas lluvias invernales, en el tramo de la calzada romana la
hierba se había apoderado del camino y dificultaba la circulación.
Cruzamos el Uso, un poquito de
lluvia, cruzamos el río por el dique del pantano de Azután, y pasamos a la vera
de El Bercial. El camino se vuelve muy transitable, raudos y veloces llegamos
bajo el mítico puente de Puente, donde decidimos hacer el parón y tomar nuestro
ansiado break. MoviLine pone en práctica sus conocimientos de pesca, que si
peces-gato, que si barbos … yo, solo veía peces.
La vuelta y con el aire a favor
nos hace pasar por Alcolea y por la cañada nos dirigimos hacía Calera; las
fuerzas comienzan a faltar, a Meji se le venía acercando su amiga la pájara,
pero todos unidos, viento en poca y a toda vela el ritmo no decae en demasía.
Torres, con las picantes
historias de su amiga Toledana nos hace el camino más ameno, y entre risas y
charcos llegamos triunfales en pleno bodorrio, la plaza ¡abarrotá!, ¡cómo
estaba la plaza!
Cuatro campeones tras 73 kms de
lucha, viento, agua y marea, que como cuatro mochuelos decidieron sin más ir a
descansar a su olivo.
Esperemos tiempos mejores para
seguir preparando la Guadalupe 2014 y … AL ATAQUE!!!
Escribe y edita:
Texinas el sustituto