Sin tener muy claro dónde ir nos
presentamos por la mañana los pocos, pero bien avenidos buscando guerra.
Los días anteriores guaseábamos intentando
subir a resolver los problemas de búsqueda de red que tienen las antenas del
Piélago; dado que nosotros disponemos de la tecnología necesaria para llevar a
cabo esa labor, estábamos super-dispuestos a colaborar con la causa. Resulta ser,
que a la mayoría de los integrantes del Club, les gusta el olor de las sábanas
más que los canutos al amigo de Benito, pues se decide no subir hoy, y dejar la
visita para tiempos mejores, en los que consigamos la afluencia de mas
técnicos, y es que, a la hora de salir, nos falta er Viti, que ha estado toda
la noche soplando y no como el aire; también falta el abuelo, que asoma el WV
vestido de pitiminí para jugar al mariconismo, digo al pabel, también falta el
quesi digo el presi …
Todos los que estábamos, los
hermanos más Largos ¡qué bielas tienen!, los hermanos Phineas y Ferb, con la
cadena y vivienda de Bob Sponja recién reparadas y preparadas pa otros cinco
mil, también estaba Pakito, que como ha estado en el paro ha hecho un curso de
contabilidad y ahora sabe de números, Benito que no es lopera pero si perrote, Mejillón
el rutero, Po’Cholo con sus ruedas nuevas y el editor, o sea yo.
Después de que el repeinado
abuelo nos de la hoja de ruta, nos haga las primeras fotos, y delegue semejante
cometido – refunfuñando (¿la cuidaran estos como yo?), salimos de una puñetera
vez, y ya a las 8:20 ¡mínimo!
Subimos a Gamonal, y por el
camino que sube a la Encarnación, seguimos las veredas que nos llevan a la
cuesta de los yubacanes, pero ¡sorpresa! ¡coño, si ya esta subida!, pues
adelante …
Justo al coronar el tope de
cuesta, el amigo Mejillon, nos dice que conoce una senda nueva y que está bien.
Comienza la ruta siendo un camino más o menos normal, y sin darnos cuenta nos
vemos totalmente rodeado de piedras … entre juncos y tomillo se oía alguna voz
que decía “¿ande irán estos?, ¡si la última cabra que pasó por aquí se fue con
esguinces hasta en las orejas!, ¡la tuvieron que escayolar hasta las pestañas!
¡qué fuerte!, la bici no paraba,
piedras y más piedras, el entorno era maravilloso, pero el tramo fue duro y muy
muy exigente, pero exigente (aunque bajábamos) físicamente y mecánicamente, la
bici del pequeño de los Rincones sufrió un percance que más avanzada la ruta fue
resuelto con gran maestria mecánica y las mejores herramientas puestas a
nuestra disposición por gentileza de nuestro patrocinador “Pollitas Castellanas
Ponedoras” digo “Castellana de Carrocerías”.
La ruta fue avanzando por terreno
que ya conocemos, iba siendo más o menos sencilla, aunque algunos se empeñen en
complicarla, pues resulta que Benito abriendo ruta con las cubiertas del quard,
medio frena, se atraviesa, y alguno que en caso de guerra todos los agujeros
son trinchera, va y le abre la puerta del garaje, perdió su virginidad casi sin
darse cuenta y esta vez sin preliminares.
Tras llegar a la cuesta matamulas
todo ello en terreno más o menos conocido, de saltarnos la tomillera donde
estaba escondido “el tío la vara” con su capa “saco esparto lleno de pulgas”
(joder, hoy que venía cuerpo …), bajamos por la senda Vitiriana buscando el
cordel, que directo nos llevará, a la gran cuesta.
Ubicados ya en ella, los hermanos
bielas largas empiezan hacer de la suyas, los demás oliendo culos y aguantando
aprietadientes el subidón …
Ya en to lo alto, supermerecido
break, clases de mecánica impartidas por el pequeño de los Rincones, y
adelante, que algunos tienen el goteo napial a tope.
De Segurilla, y hacia Mejorada
por el camino de siempre, nos cruzamos con el ermitaño que reside en la atalaya
y que tan limpia y libre de telas de araña conserva, además de un rebaño de
perfumadas hembras con sus sabrosos retoños que nos saludaban coquetonas a
nuestro paso. Llegamos a la desierta Mejorada buscando agua “ande andará!”,
pues pa’lante, dirección Gamonal.
Fuerte bajada tan solo
interrumpida por un lejano peatón que a lo lejos nos saludó y que resultó ser
nada más y nada menos que nuestro veterano conocido guerrero Hilario. Saludos y
adelante, que los mocos no paran … fuerte la bajada que nos esperaba y con
regueras superpeligrosas en las que Po’Cholo estuvo a puntito de descargar la
Z-15 llena de perfiles de AL.
Ya en Gamonal buscando con
tranquilidad el pueblo, y tras pasar el puente de la A-5, las burras comienzan
a ponerse nerviosas. El Largo-te tira como el TALGO camino de Cáceres, Pakito
en la bajada del canal le da un fuerte relevo que nos deja a todos
boquiabiertos y ya con la típica tiritaera de piernas … el pequeño de los
Rincones adelanta por la izquierda con la burra retozando como una yegua en
celo, a esto le da el relevo el gran Rincón que sin bajar el ritmo aproxima su
llegada a la meta volante en lo alto del puente de la vía, que fue coronado en
primera instancia por Largo-te y su puya final capaz de haber tumbado a un
Vitorino de 600 Kg., solo podemos mirar al cielo y dar gracias al altísimo, ya
que a Movi-Line se le salió la cadena, si no, hubieran despegado los dos en lo
alto del puente como el APOLO XI cuando llegó a la luna (que está más cerca que
Calera).
La ruta no fue muy larga, pero
fue exigente, el Club está que se sale, y Guadalupe tiembla …
Amigos, espero veros pronto, no
sin recordaros una vez más …
AL ATAQUE!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario