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martes, 20 de noviembre de 2018

CARRASCALEJO, ALLÁ EN LA VECINA CÁCERES


Anduvimos en los previos días pensando si habría excursión o todo quedaría de nuevo en nuestra zona, oye, que no tiene desperdicio, pero parece que apetecía …. al final lo que salió fue un batiburrillo, también se puede llamar súper-ruta o incluso antiguamente alguno lo llamaba – encerrona – aquí os cuento como nació una nueva ruta, veréis..

Esta vez el tiempo nos tiene a todos a cuadros, ojo, no a nosotros, a todos los españoles; el viernes cuando estábamos preparando la ruta – hablando de posibilidades – estaba lloviendo, auguraba buen día para el sábado, y el domingo en teoría de nuevo se rompía el cielo.

Así fue, tanto es,  que alguno salió hasta de corto – aunque él fuera el más Largo –, bueno, se me olvidaba, en la alameda, como de costumbre estábamos, nada más y nada menos que el Abuelo – sacando fotos a los otoñales colores –, los hermanos Rincón, Largo-te – como ya había dicho – & I; también estuvo Joaqui, que fue el que nos chivó que algún que otro integrante había decidido hacer más temprana la guerra por su cuenta.

Salimos dirección Calera, y no está muy claro que es lo que vamos a hacer, unos quieren ir a Ciudad de Vascos, y otros dicen que con ir al Cuco va a ser suficiente, el caso es que según van cayendo los kms. por la cañada, algún iluminao va y suelta … podíamos ir a Carrascalejo, ¿y para qué vamos a atascar? ¡todos a Carrascalejo!

Avanzamos por la cañada, el tránsito por la misma es difícil y pesado, hay importantes charcos difíciles de vadear – sin mancharte claro está – y en ocasiones no son de agua, a poco en el horizonte alcanzamos a ver Alcolea, la misma que atravesamos para que tras una apetitosa cuesta-abajo y tras pasar un antiguo puente sobre la cañada, nos deje en la periferia de Puente del Arzobispo, que sin entretenernos también cruzamos por su plaza, ¡en obras! …

Bajamos por la calle de los soportales que directa nos llevará al puente que da nombre a la bonita villa situada en plena cañada, al cruzar el mismo, que sesga como un jamonero chuchillo el más largo de los peninsulares ríos, en el pequeño pico que adentra la provincia cacereña nos hacemos unas instantáneas junto al perenne peregrino que indica el camino a seguir a la magnífica villa monacal de Guadalupe.

Continuamos, que si tenemos intención de llegar al objetivo, no podemos andar entreteniéndonos mucho … junto a la carretera, discurre el señalizado camino durante unos poquitos kilómetros hasta que coronamos y saltamos la carretera; el camino ya pinta otro color, ya es de los que se deja … se deja andar, correr y disfrutar. Sinuoso, sube-bajas, metidos entre encinas y coscojas, con aromas a tomillo y romero en esos inmensos milenarios berrocales; y tras recorrer y disfrutar los mismos, entramos, esta vez por distinto sitio en la cacereña población de Villar del Pedroso … ¿os habéis dado cuenta de que hemos cambiado de provincia? ¿de que hemos cambiado de comunidad? … magnífico Club, corriendo por esos andurriales, caminos sin barreras, caminos sin aduanas, disfrutando de nuestro deporte, de nuestra afición, de nuestras bicis, de nuestros compañeros, de la naturaleza, repito, sin barreras.

Salimos de la población buscando de nuevo las antiguas pistas que a vecinos unían, unos con otros, pueblos con pueblos, caminos de trueque, caminos de intercambio, que habrán visto estos caminos … ahora nos ven a nosotros, disfrutando y respetando, los caminos y el entorno; y en nuestras pupilas ya la silueta por nuestra izquierda del solitario cerro de La Estrella, y al fondo dirección S, las Villuercas y entre ellas la mordida del paso Arrebatacapas.

Encinas centenarias junto al camino, ganados pastando, chozos refugio de antiguos moradores y tareas de labranza, nos encaminaran ya muy en breve al punto fijado … Carrascalejo, ya con nuestros marcadores marcando los 50 … no quiero pensar en qué se va a convertir esto, pintar pinta bien, de momento … break, y de lo más variado, porque hasta refresco-fresco tuvimos, e incluso en una fuente instalamos un improvisado lavadero de bicicletas.

Breve fue el tema, pues aun nos queda el camino de regreso, salimos del pueblo y paramos a ver de nuevo a mi burrita en el cercado cercano al colegio; sin soltar el camino ya nos dirigimos al siguiente punto en el camino. De momento nos dedicamos a avanzar, que no es poco.

Terrenos nuevos, terrenos desconocidos de nuevo subidas, de nuevo bajadas, encinas, más chozos, grandes encinares, sinuosos caminos, charcos, barros … ¡se puede pedir más! terminamos llegando al ya conocido paraje donde desemboca el arroyo Navalgallo en el Pedroso y que a su vez sirve como límite provincial que de nuevo nos adentrará en las tierras Toledanas, de vuelta a nuestra tierra.

Por el anchuroso camino llegamos a la ya conocida Estrella, no sin antes hacer parada en el paraje del bonito puente del Anguilucha junto al pozo y las pilas de lavar tan utilizadas en otros tiempos. Esta vez ya si La Estrella.

En este punto surgen posibilidades para la vuelta … las dejamos abiertas para próximas aventuras, ya que la cordura y la hora que tenemos hace que tomemos la ruta que más directa y rápidamente nos traerá de nuevo a casa.

Cambiamos encinares por olivares, olivares que engrasarán nuestras bicicletas para llegar suave y sin ruidos al pueblo, que cuando lleguemos la gente estará echada la siesta.

Bajamos fuerte hasta el Uso por el asfaltado carreterín que luego de subida nos llevará hasta Aldeanueva de Barbarroya, donde haciendo un gran esfuerzo nos llevará por la vía de nuevo – viento en contra – hasta la vecina Calera y de esta hasta el pueblo.

En nuestras piernas casi los 100 tocamos y con un porcentaje considerable, digno de los más profesionales ciclistas integrantes de grandes pelotones.

Aventuras como esta … 100 tenemos preparadas, animaros para hacerlas junto a nosotros, pues es seguro que podremos repetirlas.

Me despido como siempre hasta la próxima, no sin recordaros una vez más … AL ATAQUE!!!


 







2 comentarios:

  1. Buena mañana aunque muy sufrida debido a el aire el barro el terreno muy pesado, pero bueno todo llevadero con buena compañía ,esperemos hacer otra super ruta , que esto no pare. Como siempre todo muy bien explicado , me falta ver los vídeos pero eso lo dejo para mañana

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  2. Tupaaaa de kilometros nos metimos el sábado, pedazo de rutón con mucho barro ( ojo como se pusieron las bicicletas) pero con buena compañía. Nos sobró alquitrán y vía, la próxima vez habrá que tirar por otra alternativa, como dice el EDITOR casi 100 y los últimos con el aire en contra. Llegamos a la hora de comer, las cañas para otro día. Muy buenos los videos y buena crónica. Nos vemos en la próxima un saludo y ¡¡DALE A LOS PEDALES!!

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