CERRO DE LA ESTRELLA

Con las ideas muy claras y previendo la que se avecina (Guadalupe) vamos a hacer una fuerte para ir cogiendo puntos, que nos harán falta.

Salimos unos pocos (pocos) buscando una vez más, aventura. El presi, Pakito, el abuelo, el amigo de Benyi, Vicente y un servidor <se va echando de menos a los que iban saliendo ya, no me quiero dejar a nadie en el tintero, pero ¿qué pasa con los hermanos Rincón, Chechu, Meji-llón, Isma, Gerardo, Duví, Largo-te, Viti?, con los que no salen pero también nos acordamos, los Albertos (4), Miguel, Diego, Javi y Roperillo (que no se han estrenado), Juan, Hilario, el nuevo Javier … en fin podría estar contando ..., pero no es esto para lo que de momento estoy escribiendo.

Vamos por la vía dirección Aldeanueva y con fuerza, <que los agentes motorizados se las vieron pu..s para coger rueda>; nos salimos de la culona y por el carreterín que une Aldeanueva con la Estrella bajamos fuerte al Uso y comenzamos con la picajosa subida. Ya el calor empieza a hacer acto de presencia y en una regla de tres directamente proporcional se dan los siguientes factores: dureza + calor = presi + abandono, que si tengo que irme, que si he quedado, que si una comida; pues nada, a partir de ahora en vez de el presi va a ser el “quesi”.

Tengo que decir que no fueron muchos los que coronaron, entre otras cosas porque no fuimos muchos los que salimos, que cada uno con mucho esfuerzo llegó hasta donde pudo, y que mi más sincero  homenaje a cada uno de ellos, aunque sea sólo por la compañía, por el esfuerzo de tener que levantarse … etc. (lo ves Pakito, no me meto contigo, ni con tu rodilla, ni con tu carácter negativo, ni con tu bicicleta que es la que más pesa, ni con tu espalda <que la dio envidia de la mía> ni con lo blandito que eres <que vales para las pizzas del Pekas> … no me meto contigo).

Continuaron algunos, a coronar tan bonita hazaña y ya no digo nombres, solo decir que el abuelo tiene razón en todo, y es que cuando él se come los platos grandes los demás andan con los platillos de postre. Además y con sus razones ya fundadas, se sabe de porque el nombre de aquel cerro, y es que es tal su altura que ya se llega a tocar las estrellas, vamos, que parece el planetario.

Volvemos contentos por el objetivo conseguido, pasando por la fuente blanca (pilas de Aldeanueva) donde un espontáneo quería que le trajéramos hasta Talavera en el suciporte, ¡pero es que no se dá cuenta Ud. de que lo traemos lleno de pimientos!.

Llegada triunfal al pueblo y puntos sumados en nuestro haber para lo que nos espera …

Os esperamos a todos, y recordad …

AL ATAQUE!!!